En el trabajo, en tu vida personal o incluso con cosas simples o situaciones que antes no te suponían un problema y ahora sí.
Te hablo de esos pensamientos negativos que te saltan a la cabeza como un resorte y casi sin que te des cuenta cuando tratas de pasar a la acción con tus objetivos, o avanzar con tus proyectos.
Es como si tu mente te llevase automáticamente al NO.
Y aunque eres consciente de ello, no entiendes por qué te pasa eso o qué está fallando, cuando sabes que has hecho cosas más difíciles y que lograr ese objetivo significaría una gran mejora en tu vida.
Sin embargo ahora es como si una vocecilla se encargara de aguarte la fiesta cada vez que intentas alzar el vuelo con tus proyectos y de recordarte que no eres capaz, que no va a merecer la pena, o peor aún, que el problema eres tú.
Total, que algo positivo como debería ser pensar en tu objetivo se acaba convirtiendo en miedo, inseguridad, frustración, y un bloqueo que te paraliza y te impide avanzar con tus proyectos.
"Creo que otros pueden y yo no. Lo peor es que soy consciente de que yo misma me freno y me lo digo todo".
"Como creo que haga lo que haga no servirá de nada, me acabo quedando de brazos cruzados y así claro, es imposible avanzar con mis objetivos".
"Creo que tarde o temprano voy a acabar tirando la toalla como hago siempre que me propongo algo, así que para qué esforzarme".
"Creo que si creyera más en mí llegaría lejos porque soy consciente del potencial que tengo y de que cuando me pongo en serio, consigo lo que quiero".
Es esa sensación de querer y no poder que te mantiene en esa lucha mental continua. Y por mucho que otras personas te animen o te digan que eres capaz, sigues sin creértelo y sin encontrar la tecla que está fallando en tu cabeza. Lo peor es que los días van pasando y ves que sigues igual. Sin atreverte a dar ese paso que sabes que necesitas con el que lograrías un avance real con tus objetivos.
Puede que en alguna ocasión hayas intentado luchar contra ese machaque mental a base de repetirte frases positivas para empoderarte y autoconvencerte de que sí podías, pero nada de eso llegó a dar los resultados que tú querías.
Quizás hasta te produjera una sensación de fraude o incoherencia en plan pero a quién quiero engañar si no me lo creo ni yo, que te desmotivaba aún más y te dejaba sin recursos.
AQUÍ VA UNA VERDAD INCÓMODA
Hoy en día se habla mucho de creencias limitantes como si éstas fueran cosas que pudieras tirar a la basura, o eliminar a golpe de varita mágica con tan solo leer un artículo en Internet, proponértelo o echarle voluntad.
Pero piénsalo, si fuera tan sencillo, ya hace tiempo que lo habrías hecho, ¿no crees?
DÉJAME EXPLICARTE POR QUÉ NO FUNCIONA ASÍ
Actúan de la mano con el resto de procesos que ocurren en tu cabeza y con tus otras creencias.
Por eso, positivizar tus creencias no va de eliminar ideas sueltas. Antes necesitas ENTENDER cómo funciona tu cabeza para que ese cambio de mentalidad beneficie al resto de creencias sin riesgo de nuevos autosabotajes.
Entiendo que a simple vista pueda sonar difícil y que eche para atrás. Por 3 razones además:
1.- Ni a ti ni a mí nos enseñaron de pequeños cómo funciona nuestra cabeza ni nos dieron herramientas para conocernos mejor.
2.- La mayoría de las creencias son inconscientes, lo que hace que a veces cueste verlas o detectarlas.
3.- La propia creencia de que cambiar tu forma de pensar es difícil, hace que te lo imagines y lo vivas como tal.
Detectar y cambiar tú mismo tus creencias es cuestión de tener las HERRAMIENTAS y la GUÍA adecuada de un profesional que te marque los pasos y te facilite el camino.
Acuérdate si no de las veces en las que te has dejado ayudar por alguien experto que te ahorraba cometer errores, te acompañaba y te proporcionaba la seguridad de saber que estabas en buenas manos.
ASÍ ES CÓMO VOY A AYUDARTE
Mi programa con acompañamiento, práctico, realista y lleno de herramientas aplicables que podrás hacer a tu propio ritmo.
"Siempre he considerado que tenía muchas creencias pero nunca he sabido cómo cambiarlas. Hice el programa para trabajarme una creencia que tenía desde hacía 15 años que me limitó bastante en mi vida personal.
Antes de finalizar el programa ya había conseguido debilitar mi creencia, ir integrando la nueva e ir a por mi objetivo sin las trabas de antes. Ha sido revelador porque ahora cada semana me trabajo una nueva creencia y yo misma puedo darles la vuelta.
Es una herramienta fantástica que te ayuda a vivir mejor y más en paz con uno mismo. Cambia Tus Creencias ha cambiado la forma en que veo el mundo. Ha sido todo un descubrimiento, te transforma completamente".
Soy Patricia Ibáñez, fundadora de la primera Escuela en español de mentalidad y PNL (Programación Neuro-lingüística) para lograr objetivos.
Conozco muy bien esa sensación de frustración de cuando ves que tienes un objetivo importante pero que algo dentro de tu cabeza te frena y te impide disfrutar de los pasos.
Pasé toda mi etapa escolar y de instituto creyéndome una inútil total porque era mala en matemáticas. Tenía tan interiorizado que el problema era yo y que siempre lo sería, que hacía que me presentara a los exámenes o atendiera en clase con una sensación de derrota y fracaso.
Tiempo después, ya con treinta años, esa creencia de que era tonta me seguía acompañando. Era como un sonido de fondo que me repetía que donde otros podían yo me tenía que esforzar más, o me iba a ser más difícil. Yo misma me estaba cerrando puertas.
Hasta que descubrí la PNL y todo comenzó a cambiar. Gracias a sus herramientas, fui aprendiendo a hacerme mejores preguntas, a cuestionar las creencias desde la raíz, sintiendo cómo esa losa que siempre había arrastrado se empezaba a hacer añicos.
No te imaginas la liberación que sentí. Por fin me sentía capaz de proponerme mis objetivos y de emprender mi propio negocio sin ponerme frenos y con una determinación hasta entonces desconocida. Con más ilusión y más segura de mí misma.
Con la PNL encontré la horma de mi zapato. Por fin una herramienta me ayudaba a cambiar mi manera de pensar y actuar con más lógica, con conciencia de cómo lo estaba haciendo y sin las dichosas frases motivacionales.
Detectar y cambiar tú mismo tus creencias es cuestión de tener las HERRAMIENTAS y la GUÍA adecuada de un profesional que te marque los pasos y te facilite el camino.
Acuérdate si no de las veces en las que te has dejado ayudar por alguien experto que te ahorraba cometer errores, te acompañaba y te proporcionaba la seguridad de saber que estabas en buenas manos.